¿De qué manera charlar públicamente de forma segura? Prepara el alegato con seguro. Repasa lo que dirás, de qué forma decirlo y exactamente en qué entonación. El contenido. Crea un mensaje que sea simple de comprender y que logre llegar a tu público. Apóyate en los movimientos. No poseas temor a confundirte.
¿Te imaginas charlar públicamente en frente de un conjunto de gerentes y llevarlo a cabo de una manera dinámica y natural? ¿Quisieses enseñar un informe técnico frente a un conjunto de inversionistas y sentir que tus ideas fluyen como un río de forma continua y que podrías charlar por horas sobre tu tema sin siquiera recordar? Prepárate para conocer de qué forma puedes conseguirlo.
Escucha el audio aquí: http://hablaenpublicoconpoder.com/blog/audio/Métodos_para_hablar_en_público_con_fluidez.mp3
Visualiza tu éxito
Conforme vas escribiendo, planeando y llevando a la práctica tu alegato, visualiza tu éxito y también imagínate comentando con una voz segura frente a un público que te escucha atentamente. Piensa en el público aplaudiéndote e impide imaginar probables inconvenientes y centrar tu atención en aquello que puede salir mal.
Esto no quiere decir que no seas siendo consciente de los probables imprevisibles, y que tomes medidas para evitarlos, pero inquietarte en demasía por ellos va a ir en oposición a tu seguridad personal y de tu aptitud para charlar de manera segura.
Haz tuya la cita de Sócrates, “Todo el planeta es elocuente en el momento en que charla de lo que sabe”, y empápate sobre el tema del que vayas a charlar. Cuanto mucho más domines el tema, mucho más seguridad vas a tener para supervisar los nervios y también improvisar si fuera preciso.
La relevancia de la fluidez verbal y consejos para progresar tu oratoria
Fluidez verbal se comprende como la aptitud de detallar un diálogo de forma espontánea y clara; con ella establecemos conexiones entre las ideas y oraciones de manera natural. En el momento de ofrecer un alegato esto nos asiste a disertarlo de forma legible, a un ritmo conveniente, eludiendo las pausas superfluas.
De ahí que es esencial entrenar la fluidez en el momento de expresarnos, observemos 3 consejos para prosperar tu oratoria:
No terrebilices
Meditar de cara a tu exposición que todo saldrá mal, que no serás con la capacidad de llevarlo a cabo, que te marchas a confundir, que el público se marcha a aburrir y desgracias múltiples afines es justo lo que no debes llevar a cabo. Deja de poner piedras en tu sendero y piensa al contrario.
Si estos pensamientos tan horribles y también incapacitantes se muestran de forma espontánea y se vuelven súper resistentes, realizando difícil que se vayan, haz una prueba: respira despacio, de forma sosegada y profunda unos cuantos ocasiones, hazlo hasta el momento en que aprecies que tu abdomen se infla. Mientras que respiras visualiza que la exposición te sale de gran lujo ¿Por qué razón? Está comprobado que la respiración abdominal asiste para contrarrestar el temor y visualízate consiguiendo el resultado que buscas.